FaithLeaks publica documentos confidenciales sobre el abuso sexual infantil en los Testigos de Jehová (traducción actualizada)
Los fundadores de MormonLeaks, una organización de
transparencia que ha lanzado
cientos de documentos controvertidos relacionados con el
funcionamiento interno de la Iglesia Mormona, lanzó recientemente FaithLeaks,
un proyecto ambicioso y de largo alcance que tiene como objetivo exponer la
corrupción y el abuso en otras organizaciones religiosas. Hoy, el nuevo
grupo ha publicado docenas de páginas de documentos relacionados con
acusaciones de agresión sexual dentro de la Iglesia de Testigos de Jehová,
documentos que presumiblemente forman parte de una base de datos que los
funcionarios de la iglesia se han negado a ceder en un juicio de abuso sexual
sin igual, resultando en una batalla legal de medio año y millones de dólares
en multas.
Las 69
páginas de documentos detallan cómo las autoridades de los testigos de Jehová y
los funcionarios de la iglesia manejaron las acusaciones de agresión sexual
reiterada por uno de sus líderes locales. Las entrevistas y notas
detalladas compiladas por las autoridades de la iglesia sobre abusos
deshonestos y acusaciones de violación son horribles. Los 33
documentos también ofrecen una asombrosa jugada de cómo la Sociedad Watchtower
y la Sociedad Bíblica -la corporación matriz y el cuerpo gobernante de los
Testigos de Jehová, a menudo simplemente referidos como "la Atalaya"
manejaron el caso internamente en el transcurso de una década -haciendo el rol
de terapeuta, fiscal, jurado y juez- y lo lejos que fueron para mantener estas
acusaciones lejos de la "corte de justicia mundana".
Los documentos muestran que en 1.999, un comité de
ancianos de testigos de Jehová halló como verídicas las denuncias de dos
mujeres de que su padre había abusado sexualmente de ellas, pero se resistió a
formar un comité judicial interno para tomar su propia forma de acción judicial
contra el presunto abusador, porque una de las hijas no estaba dispuesta a
enfrentarse a su padre y formular formalmente las acusaciones en su contra, como
exige la política del comité judicial. Una vez que ella realizó el proceso
años más tarde, se realizó un juicio guiado espiritualmente y el abusador fue
expulsado. Sin embargo, un año más tarde este fue readmitido. Los
documentos muestran que los líderes de los testigos de Jehová hicieron sombra a
una acusadora y a su esposo por tratar de llevar este asunto a la aplicación de
la ley seglar.
[...]
4.000
dólares diarios
Varios casos judiciales han arrojado luz sobre la
omnipresencia de incidentes de agresión sexual dentro de la organización de los
Testigos de Jehová y los esfuerzos del grupo por evitar que esos casos lleguen
al público o a la aplicación de la ley. Como señala
Reveal News, los líderes de la iglesia deben informar las denuncias de
abuso infantil en la mayoría de los estados, pero 32 estados tienen leyes con
una laguna que permite al clero retener la información obtenida a través de la
comunicación con los miembros de su congregación. California es uno de
esos estados. (El extenso informe de Reveal News sobre el manejo del abuso
sexual infantil de Watchtower se
puede encontrar aquí ).
En 2.014, un juez de San Diego ordenó a la Watchtower que le
otorgara 13,5 millones de dólares a José Lopez porque fue abusado por el líder
de la iglesia Gonzalo Campos en 1.986 cuando López tenía 7 años. Otros seis
demandaron a la Watchtower alegando que Campos los había molestado, pero los
casos fueron archivados por la Corte. Los ancianos de la iglesia (que supervisan las
congregaciones) recomendaron a Campos como mentor de López, porque el padre y
padrastro de López no eran miembros de la iglesia. La evidencia
utilizada en el caso mostró que los ancianos sabían en este momento que Campos
ya había abusado de un niño y era un pedófilo. La madre de López informó
del abuso a la iglesia y se le dijo que no se lo dijera a la policía. La
evidencia del juicio muestra que un comité de la iglesia investigó las
acusaciones, pero permitió que Campos continuara sirviendo en la Iglesia. En
1.995, Campos fue removido después de que otra víctima lo acusó de abuso. Campos
fue readmitido en 2.000.
Durante el juicio, el alto funcionario de los testigos de Jehová, Richard Ashe, reveló al abogado de López, Irwin Zalkin, que la institución tenía una base de datos llena de datos escaneados, documentos que detallan décadas de acusaciones de abuso e investigaciones internas relacionadas con ellos, según lo informado por Reveal News . El juez ordenó a la Watchtower que presente los documentos, pero la organización no cumplió. El caso se abrió camino hasta la Corte Suprema de California, que también sostuvo que debía presentar los documentos. No fue así. La organización de los Testigos de Jehová apeló, argumentando que la medida del juez era demasiado dura. Una apelación de parte de la Watchtower se opuso a la multa de 13,5 millones de dólares y el caso aún está en litigio.
En el siguiente caso de Zalkin contra Watchtower,
la organización acordó compartir los archivos pero solo envió documentos de un período de cuatro años en lugar del período completo de 19 años. Todos los
archivos llevaban los nombres de los supuestos abusadores editados. Después
Watchtower se negó a entregar el resto de la información. En junio de
2.016 un juez ordenó a la organización pagar una multa de 4.000 dólares diarios hasta que presentara
los documentos. Su continuo rechazo le ha costado a la iglesia más de 2,2 millones de dólares hasta a la fecha, si es que
los pagos todavía se están haciendo.
Zalkin le dijo a Gizmodo que no podía hacer ningún comentario sobre esta historia debido a órdenes judiciales que lo limitan de discutir cualquier tema relacionado con estos documentos.
Perro
guardián de Watchtower
Hoy, FaithLeaks ha publicado una pequeña porción de lo que presumiblemente se encuentra en esa
colección masiva: varios documentos que muestran años de
investigaciones y deliberaciones sobre un líder local que presuntamente agredió
física y sexualmente a sus dos hijas y a otra joven en los años 70 y 80.
En este tesoro de documentos, la primera filtración
de FaithLeaks, la organización ha censurado todos los nombres por respeto a la
privacidad de las mujeres, ahora adultas, que presentaron sus relatos de
agresión sexual. Gizmodo vio versiones no editadas de los documentos, y pudo
confirmar que el presunto abusador en estos documentos estaba en el centro de
las investigaciones internas dentro de la organización de los Testigos de
Jehová.
El lote comienza con una carta escrita en 1.999 a la Watchtower por
tres ancianos de la Congregación Palmer de los Testigos de Jehová de Brimfield,
Massachusetts, sobre su investigación de las acusaciones. Entrevistaron a
ambas hijas, que entonces tenían entre 20 y 30 años, y buscaban específicamente
determinar si sus relatos de asalto y abuso sexual eran "recuerdos
reprimidos" desvelados o no. Una hija habló de haber sido maltratada
físicamente durante años y haber sufrido abusos sexuales durante meses, desde
que tenía 5 años. En su declaración, ella alegó que su padre le tocó
repetidamente los genitales y le examinó la vagina. Documentos posteriores
muestran que el acusador admitió ante los oficiales de la iglesia que él ató a
su hija pequeña a su cama para inspeccionar su vagina en busca de signos de
masturbación.
La carta también describe una entrevista con la
hija menor, cuyas supuestas experiencias incluyeron el abuso sexual de su padre
desde los 3 años, con 4 años de violación continua a partir de los 8 años,
según el memorando. "Ella describió que su padre se sentaría en la cama
después y lloraría mientras rezaba con ella", escribieron los ancianos. "Su
padre le dijo que si alguna vez se lo contaba a su madre o a su hermana “alguien
saldría lastimado".
Los ancianos determinaron que los acusadores
"eran bastante congruentes" y comentaron: "Ciertamente parece que
estos fueron hechos reales”. No parecía que hubieran consultado juntos
sobre sus "historias". Los hombres reconocieron que las hijas
"expresaron su preocupación por cualquier contacto que su padre pudiera tener
con cualquier niño".
A pesar de creer que las historias eran creíbles y
escuchar a ambas acusadoras expresar una gran preocupación por el daño que su
padre podría causar, los ancianos decidieron que no podían llevar el tema a un
comité judicial interno porque una de las hijas no estaba "emocionalmente
preparada para defenderse" ella misma enfrente de su padre, el presunto abusador. Para que un caso sea "perseguido judicialmente" dentro
de la Iglesia de los Testigos de Jehová, un acusador debe enfrentar y acusar a
su presunto abusador.
Sin embargo, la información fue suficiente para
justificar la destitución del presunto abusador como siervo ministerial (una posición de asistencia a los
ancianos, similar a un diácono en la Iglesia Católica), aunque permaneció en la
congregación.
Las notas manuscritas de abril de 2.003 muestran que
el esposo de la acusadora más joven les dijo a los ancianos que aún no estaba
preparada para enfrentarse a su presunto agresor cara a cara, para que el caso
pudiera pasar por el proceso judicial de la iglesia en ese momento. Estaban
investigando al presunto abusador "como sospechoso en un caso de
abuso". La persona que escribió las notas escribió "¡Probemos lo de la policía estatal!" aparentemente preocupado de que la ley seglar se
involucrase en un asunto de la iglesia.
Sin embargo, la hija estaba lista para acusar
oficialmente a su padre mediante el sistema de los Testigos de Jehová, pero por
teléfono y con los ancianos escuchando. Aquel cargo telefónico condujo a una audiencia
judicial en mayo de 2.003, cuyo programa está incluido en los documentos, y suena como salido de la serie "El cuento de la criada":
-LEER DEUTERONOMIO 19:15
-PRESENTAR DETALLES DEL 'TESTIMONIO' DE LOS TESTIGOS UNO
A UNO...
-SI HAY CULPA ESTABLECIDA, REPROBAR BÍBLICAMENTE
-DESESTIMAR Y DETERMINAR EL ARREPENTIMIENTO
El resultado no se menciona explícitamente en los
documentos, pero las notas posteriores sugieren que esta audiencia condujo
a la expulsión del presunto abusador, una acción similar a la excomunión,
porque admitió las acusaciones al examinar a su hija mayor en busca de signos
de masturbación cuando era niña.
Una nota confidencial escrita por tres superintendentes de circuito (líderes regionales que gobiernan múltiples congregaciones y son designados por el cuerpo gobernante de Watchtower) en 2.004, describe un incidente en el que la policía se presentó en el edificio de la iglesia porque una de las acusadoras y el presunto abusador estaban ambos presentes a pesar de que a la acusadora se le había garantizado una orden de restricción a su padre. El esposo de la acusadora (que era un anciano) llamó a la policía. La nota "cuestiona seriamente" la "acción arbitraria del marido de la denunciante" al eludir la organización teocrática debido a sus sentimientos personales y, teniendo en cuenta las circunstancias anteriores que rodean este asunto, también cuestiona su calificación como anciano".
Los escritores del comunicado parecen mostrar más preocupación por el presunto abusador que por la acusadora y su esposo: "Sin duda [el supuesto abusador] fue públicamente humillado por la forma de este arresto".
Otro comunicado escrito por un superintendente muestra que un "comité de restablecimiento" se reunió unos meses después para discutir si se debería dar marcha atrás al comité realizado al presunto abusador. Eligieron solo centrarse en las acusaciones de la hija mayor, que informó que el presunto abusador la había inspeccionado en busca de signos de masturbación. El comité notó que el presunto abusador "exhibió una cantidad considerable de remordimientos por sus acciones" hacia esa hija. Según el informe, el presunto abusador le dijo al comité que, en su opinión, su hija "habría sido dañada" y su creencia de que sus acciones "afectarían negativamente la relación de ella con su esposo".
En cuanto a la hija menor, que había denunciado haber sido violada por su padre, el comité de restablecimiento consideró que sus acusaciones, que se realizaron por teléfono, eran "inadecuadas", lo que le generaba más cuestiones. "Como [la hija] había presentado una orden de alejamiento contra su padre y estaba dispuesta a enfrentarlo en un tribunal de justicia mundano, se consideró que ella debería estar dispuesta a hablar con el comité", escribió el comité. (Gizmodo no pudo ubicar un registro de los procedimientos legales en el momento de la publicación).
Ese mismo mes, un líder escribió un comunicado dirigido a uno de los miembros del comité de restablecimiento. La nota incluía una entrevista con otra mujer que acusó al supuesto abusador de violarla cuando era niña, años antes. Aunque mantuvo su reclamación, las notas sobre la investigación muestran que los ancianos de los testigos de Jehová dudaron de la validez de su declaración en parte porque ella dijo que tenía los ojos cerrados cuando la estaba atacando sexualmente.
La hija que alegó que su padre la violó, hizo otra declaración oficial contra él dentro de la iglesia en octubre de 2.004. En 2.005, un comité determinó que el presunto abusador ya no podía realizar tareas como manejar equipos de audio o literatura. Se le permitió permanecer en la congregación.
Watchtower no respondió a una solicitud de comentarios sobre estos documentos, y no respondió a preguntas sobre si esta información está incluida en el archivo de documentos que la Watchtower está reteniendo a los tribunales por un coste de 4.000 dólares diarios, y si los documentos muestran que Watchtower protege a los acusados de agresión sexual infantil.
Las hijas eligieron no hacer comentarios para esta historia. Gizmodo le preguntó al supuesto abusador si había una investigación interna de los testigos de Jehová sobre las acusaciones de agresión sexual en su contra. Inicialmente negó saberlo, pero una vez que recibió más detalles, confirmó que estaba al tanto de una investigación interna sobre él con la Iglesia de los Testigos de Jehová, pero afirmó que las acusaciones no eran ciertas. Le dijo a Gizmodo, "Todo lo que voy a decirte es esto: ya se resolvió en el tribunal. Las acusaciones no eran ciertas ".
Gizmodo no tuvo la oportunidad de preguntarle sobre
su propia admisión, mencionada en un documento, sobre que había atado a una de sus
hijas y la había inspeccionado en busca de signos de masturbación.
FaithLeaks planea lanzar más documentos relacionados
con el manejo por parte de las autoridades de los testigos de Jehová de otra supuesta
conducta sexual inapropiada en las próximas semanas.
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